EDITORIAL
Mayo/Junio 2012
Desde hace tempo se habla de que el mundo del entretenimiento va a cambiar. Productoras y empresas varias se empeñan en que los usuarios vean las películas descargándolas de páginas web, previo pago, por supuesto. De hecho, ya hay muchas empresas en la red dedicadas a este negocio.
Sin embargo, muchos nos negamos a que lo virtual invada nuestros hogares, al menos en lo que al tema del Cine en Casa se refiere.
Pese a que se intente convencer a la gente de que cada vez se coleccionan menos películas, la realidad es lo contrario: cada vez hay cada vez más aficionados que optan por comprar sus películas, series, conciertos, etc., en formatos físicos. De ese modo, pueden visionarlas las veces que quieran y cada vez que les apetezca. ¿Qué sentido tiene pagar 16€ por la descarga de una película en "HD" para que ésta se almacene en un disco duro que cualquier día puede estropearse? Tal y como están los precios de los Blu-ray's actualmente, sale mucho más económico comprarla.
Además, si entramos en detalles sobre temas de calidad, no es comparable la imagen y el sonido de una película descargada en una página web destinada a la venta de material HD con la que ofrece un soporte físico como un Blu-ray.
Está claro que los fabricantes nos quieren imponer sus reglas para obligarnos a hacer lo que a ellos les reporta más beneficio. Así, los formatos virtuales de descarga les vienen como anillo al dedo, ya que se ahorran muchísimo dinero en costes de fabricación, almacenaje, distribución, etc.
Me gusta coleccionar películas, series, conciertos, documentales... en formato físico, y el Blu-ray es la mejor opción, al menos hasta la fecha.
Javier Alonso
Editor
Accede a Editoriales anteriores
Accede a la opinión de Javier Alonso sobre temas relacionados con la HD en su Blog